Cuando nos acostumbramos a tener todo con solo pulsar o rozar un botón o una pantalla y en cuestión de segundos, nada que tarde en realizarse cumplirá nuestras expectativas.
¿Por qué escribir si podemos improvisar? ¿Para qué leer si tenemos resúmenes online o amigos que leen?
Cuando se acaba la batería del móvil o se estropea el portátil ya nadie sabe que hacer. Si se cuelga una red social el mundo se nos viene abajo.
¿Dónde ha quedado nuestra paciencia?
...
...
Voy a consultarlo en Google.
6 comentarios:
Jajajaja ¡me ha encantado, Isa!
Gracias, Reyes :D
Yo de eso nunca he tenido, así que no me extraña que me siga pasando...
Besos!
Pues yo sí tengo. Tengo tanta paciencia que a veces me sorprende. ¿Será normal? Googleémoslo jajaja.
Hola amig@,
Te visito porque los temas de tu blog me resultan interesantes y útiles para mi propio aprendizaje en lo personal.
Te agrego a mi lista de blogs útiles, y si te apetece, puedes visitarme
en felicidadenlavida
Un fuerte abrazo y espero nuevos temas, para continuar disfrutando de la lectura.
Gracias por leerme, Francisco.
X, ¿acabas de inventar una nueva palabra? Googleémoslo, a lo mejor existía y simplemente soy una ignorante.
Tequila, yo tnego muy poca ;-)
Como siempre, respondo tarde a los comentarios, pero bueno.
Un beso
Publicar un comentario