domingo, 29 de junio de 2008

Relato (2ª parte)

Me miraba sonriendo, luego guiñó un ojo. Mientras le ayudaba a colocar sus cosas mi cabeza sólo estaba en lo ocurrido hacía casi seis días. Le pregunté si él sabia que iba a venir precisamente a mi casa. Sonrió y asintió. Suspiré.
-¿Por qué no me lo dijiste?
-Quería darte una sorpresa...-contestó Michael, encogiéndose de hombros.
Le tiré una camiseta, que le dio en en la cara. Parpadeó. Me miró. Yo me eché a reir.
Entonces llegó mi padre para avisarnos de que la cena estaba lista. Fuimos al comedor nos pasamos la cena charlando. Después, Michael se fue a su habitación y yo me quedé ayudando a mis padres a recoger la mesa. 
Cuando volvía a mi habitación vi luz en la de Michael. Abrí la puerta y asomé la cabeza. Michael estaba sentado en la cama, observando un cuadro que estaba en la pared. Entré y me senté a su lado. Él rodeó mi cintura con su brazo, y yo apoyé mi cabeza en su hombro. Nos quedamos así un rato. El cuadro era una perfecta representación de la Giralda y la Catedral de Sevilla. Michael me preguntó si le llevaría a pasear por Sevilla. Yo le dije que sí. Nos separamos suavemente. Él puso su mano en mi mejilla y me hizo alzar la cabeza. Nos besamos. Esa vez fui yo quién se fue sin decir nada. 

Al día siguiente me preparé para hacer de guía turística. Pasamos la mayor parte del día fuera, paseando por las calles del centro de Sevilla. Visitamos la Catedral, la Giralda, el Alcázar... Maravillas que dejaron a Michael impresionado. Mientras volvíamos, ya sobre las once de la noche, me dijo que lo había pasado estupendamente, y que yo era una chica maravillosa. No dije nada. No hacía falta. 

Casi una hora más tarde me tumbé en mi cama. Aún me ardían los labios. Mi madre entró y se sentó en el borde de mi cama.
-¿Y bien?.- me preguntó con una sonrisa cómplice.
Me reí. Mi madre me miraba sintiendo como su pequeña se hacía mayor, sentimiento que todos los padres temen sentir. Me dio un beso cariñoso en la frente y se fue. 

Veintiún años después, soy yo quién sale de la habitación de mi hija Christina, llamada así en honor a mi suegra. Acaba de volver de su primera cita.

sábado, 28 de junio de 2008

Relato

Era viernes. Mi madre me llevaba a una reunión para documentarse sobre un intercambio. Yo no tenía ganas de ir, pero las madres siempre acaban convenciéndote para que hagas cosas que en un principio no querías hacer. Así que fuimos. La charla era en mi instituto. 
Yo soporté lo primeros treinta minutos, luego salí al pasillo. Allí había un chico y una chica hablando en inglés.Al verme, se callaron. La chica me preguntó si quería sentarme. Me senté y empezamos a hablar,en inglés, por supuesto, y así fue como conocí a Arienne y a Michael, que eran hermanos gemelos. Esas navidades una persona española se iría a su casa, durante dos semanas, y después, uno de ellos se iría dos semanas a una casa española. La reunión terminó y mi madre salió acompañda de una mujer inglesa.Arienne y Michael me dijeron que esa era su madre. Yo les presenté a la mía, que me dijo que esas navidades me iría con Arienne a Inglaterra. Me puse muy contenta. El lunes salía el avión. 

Arienne y yo nos hicimos inseparables, pero con Michael casi no hablaba. Era muy reservado...Aunque debo admitir que me gustaba bastante.
 Una tarde, Arienne y Christina (su madre) salieron a comprar los regalos de Navidad. Estábamos solos (Michael y yo) porque su padre aún no había vuelto de hacer recados. Yo me fui al salón y me senté en el sofá. Vi un piano y pe puse a tocar una canción. Al rato, Michael entró y se quedó junto a la puerta, escuchando.
-Tocas muy bien.-dijo, en inglés.
-Gracias.-dije, con una sonrisa.
Estuvimos hablando durante mucho tiempo y, de pronto, él me dijo:
-Me gustas...
Yo me quedé callada. Levaba allí casi dos semanas. Me tenía que ir en poco, ¿y me lo decía ahora? Le dije que yo sentía lo mismo. Nos miramos. Escuché el coche de Christina, que llegaba.

Michael se acercó a mi, y me besó dulcemente. Luego se fue a su habitación, sin decir nada. 
Dos días más tarde volví a España, y media semana después Michael vino a mi casa, de intercambio.

jueves, 26 de junio de 2008

Estuche

En el blog de mi padre( http://ahdelavida.blogspot.com ) hay algunos Haikus míos.
El preferido por los lectores es el que reescribo a continuación:

Por la abertura
como un niño curioso
asoma el lápiz

Espero que no me acusen de plagio ¬¬
jeje ;)

Por fin un blog

Aquí está. Mi blog. Por fin...
Gracias a todos los que me habéis animado a empezar con un blog, en especial a Soboro y , como no, a mi padre.
Esta entrada debería haber sido la primera, pero tenía ganas de publicar algunos de los Haikus que mi padre no había publicado en su blog ...
Espero que os guste...
Ya se me irán ocurriendo más cosas para escribir y así intentar (y conseguir, espero) que mi blog llegue algún día a igualar la calidad del de mi padre.
De nuevo, GRACIAS.

Limón

Era amarillo
como aquél submarino
de épocas pasadas

Soledad

Sueña despierto.
Se imagina su mundo,
ríe animado